Una graduación especial: 120 estudiantes están preparados para la misión

Escuela de MisiónDurante este año, la Universidad Adventista del Plata ha contado con diversas propuestas misioneras para sus más de tres mil alumnos. Grupos misioneros, clubes de conquistadores, escuelas sabáticas y actividades desde las diferentes facultades, se han desarrollado durante el ciclo lectivo, reforzando los valores de servicio que sostiene la Institución.
Uno de los espacios, que este año reunió a más de ciento sesenta jóvenes, fue la Escuela de Misión. Este programa, coordinado por el área de desarrollo espiritual, está destinado a capacitar a alumnos y futuros misioneros para desenvolverse asertivamente en los distintos escenarios que ofrece la misión evangélica. Esta escuela tiene como propósito capacitar de manera dinámica, por lo que en cada encuentro convoca a distintas personas que han experimentado el servicio en otros lugares del mundo, quienes comparten sus testimonios del cuidado y el amor de Dios. Por otra parte, se invita a profesores, pastores, médicos misioneros y profesionales autorizados en temas específicos para que expongan sobre tópicos de suma importancia para la misión.
El pasado viernes 4 de noviembre, ciento veinte jóvenes pertenecientes a la Escuela de Misión, finalizaron este año de preparación. En el templo de la Universidad, los jóvenes recibieron el certificado y se comprometieron, ante la congregación, a servir a Cristo en el lugar al que él los llame.
La Agenda tuvo la oportunidad de conversar con el Pr. Darío Maldonado, capellán de la Universidad, para conocer su percepción sobre esta graduación: «Estamos sumamente felices. Este año tuvimos la posibilidad de graduar a más de ciento veinte jóvenes que, luego de asistir cada viernes y rendir un examen con el libro Pasaporte para la misión, están capacitados para servir en diferentes agencias y organizaciones. Los jóvenes saben cómo contextualizarse y cómo hacer un buen trabajo misionero. Además, hemos visto un crecimiento en el liderazgo de aquellos que han participado. El sábado, pudimos cerrar este ciclo con una graduación, y seguidamente pudimos festejar con todos los integrantes de Escuela de Misión, en donde pasamos un buen momento y degustamos comidas típicas de cada una de las culturas que estudiamos durante el segundo cuatrimestre. Hemos conocido muchas historias y testimonios durante este año y comprendemos en primer lugar que empezamos a vivir la atmósfera del cielo cuando ayudamos y hacemos misión con quien está a mi lado».