El Pr. Helio Carnassale brindó una charla a alumnos de Teología

El Pr. Helio Carnassale durante la charla que brindó en la Facultad de TeologíaDurante la mañana del 15 de noviembre, la Universidad Adventista del Plata (UAP) recibió la visita del Pr. Helio Carnassale, director de Asuntos Públicos y Libertad Religiosa y director del área de Espíritu de Profecía de la División Sudamericana (DSA) de la Iglesia Adventista del Séptimo Día (IASD). El líder sudamericano en libertad religiosa fue recibido por el Dr. Juan Martín Vives, director del Centro de Estudios en Derecho y Religión (CEDyR), que funciona en esta institución.
El Pr. Carnassale brindó una charla a los estudiantes de la carrera de Teología, en el edificio que dicha facultad tiene en el campus universitario.
Finalizada esta actividad, La Agenda, tuvo la oportunidad de dialogar con el director de Libertad Religiosa para la DSA acerca del objeto de su visita a esta casa de educación superior: «La DSA tiene cuatro énfasis para este quinquenio: comunicación, dones espirituales, formación de nuevos pastores y puentes con las nuevas generaciones. Justamente, en el aspecto de formación de nuevos pastores he propuesto, desde el área que coordino, visitar los ocho seminarios de Teología que funcionan en Sudamérica a fin de presentarles el concepto de libertad religiosa y los desafíos que tiene este liderazgo en el ministerio».
Consultado acerca de la importancia de tener un concepto claro de libertad religiosa en los futuros pastores, el Pr. Carnassale expresó: «Muchos jóvenes cursan sus estudios superiores en universidades que no son adventistas. Ellos deben lidiar con problemas que incumben a la doctrina del sábado y a la intolerancia religiosa; además, otro sector de la comunidad de la iglesia también tendrá estos problemas, en este caso, en sus áreas laborales y otros espacios de desarrollo social. Por lo dicho, los pastores deberán contar con una formación acorde a estas exigencias, con el fin de poder orientar y ayudar a defenderse en estas situaciones».
Preguntamos al Pr. Carnassale de qué manera el liderazgo de la DSA apoya el área de su especialidad. «Desde el último congreso de la IASD realizado en la ciudad de San Antonio, Texas, Estados Unidos, el Pr. Erton Köhler ha dado un nuevo impulso a esta área. Esto resultó en la designación de una persona para que dedique tiempo completo al área de libertad religiosa. Y así estamos haciendo esto desde agosto del año pasado, orientando a todos los líderes de campo para que sean un apoyo en su comunidad. A razón de esto, este último fin de semana me reuní con los directores de Libertad Religiosa de la Unión Argentina de la IASD, en la ciudad de Buenos Aires. Allí, nos reunimos alrededor de ciento cincuenta personas, representando a sesenta distritos pastorales del país. Se brindaron herramientas para que nuestros líderes sean un gran apoyo para los componentes de la familia de la iglesia».
La UAP, desde el año pasado, cuenta con un centro de investigación como el CEDyR. Pedimos al Pr. Carnassale que comparta su visión acerca de la importancia que tiene el hecho de contar con un espacio como este en la UAP: «Su importancia es muy significativa. El área de Libertad Religiosa no solo necesita de promoción, sino que también de un claro concepto de cómo y cuándo defendernos ante distintas amenazas que limiten este derecho. Otro aspecto importante es la investigación. En este caso, está lo sustancial de contar con un espacio como lo es el CEDyR, en la UAP o como el núcleo de estudios que se encuentra en el Centro Universitario Adventista de San Pablo. Ambos centros son una sustentación científica que necesitamos; es el área académica que necesitamos en libertad religiosa».
Concluyendo la entrevista, consultamos al Pr. Carnassale acerca de los desafíos que enfrenta el área que representa en la DSA: «La intolerancia religiosa está creciendo, por más extraño que pueda parecer. Hoy, cerca de un veinticuatro por ciento de los países del mundo tienen un alto nivel de intolerancia. Esas naciones representan al setenta y cuatro por ciento de la población mundial, lo que nos da una idea del grado de intolerancia religiosa vigente. El gran desafío que debemos enfrentar es el hecho de que somos minoría, pero una minoría dentro de otra que es el mundo cristiano».