El Dr. Vives participó en importante encuentro organizado por la IRLA
Del 16 al 18 de agosto, la Asociación Internacional de Libertad Religiosa (IRLA, por sus siglas en inglés) organizó su encuentro anual de expertos en la Escuela de Teología de Harvard en Cambridge, Massachusetts, Estados Unidos. Este encuentro reúne cada año a un grupo de académicos de todo el mundo para discutir sobre temas relacionados con la libertad religiosa. El tema de este año fue «En busca de una normativa internacional de libertad religiosa: desafíos y promesas».
En representación de la Universidad Adventista del Plata, estuvo participando en este encuentro de expertos el Dr. Juan Martín Vives, director del Centro de Estudios sobre Derecho y Religión (CEDyR) que funciona en esta casa de altos estudios.
La Agenda pudo dialogar con el Dr. Vives acerca de esta experiencia que reunió a un panel internacional de más de dos decenas de eruditos y abogados, conocido como el Encuentro de Expertos, que es citado una vez al año por la IRLA.
¿Cuál fue el objetivo de este encuentro de expertos de la IRLA?
IRLA realiza distintas actividades de defensa y promoción de ese derecho fundamental. Una de ellas es una reunión anual, llamada Encuentro de Expertos, en el que en torno a veinte especialistas y académicos de diversas partes del mundo se dan cita en un lugar con el objetivo de compartir sus opiniones y experiencias. Como resultado de las conversaciones, se emite un documento consensuado en el que se expresan conclusiones y se realizan recomendaciones a ser adoptadas por gobiernos y autoridades internacionales. Este año el tema era «En la búsqueda de normas internacionales de libertad religiosa: promesas y desafíos».
¿Quiénes participaron en este encuentro?
Los especialistas participantes proceden principalmente de Norteamérica, Europa y África, y son en su mayoría catedráticos universitarios, y funcionarios gubernamentales y de organizaciones internacionales. A partir de este año, estoy invitado a formar parte de ese grupo, por lo cual hay representación de Sudamérica. Y está planteada también la necesidad de incorporar representantes de Asia.
Es emblemático que este encuentro se haya realizado en Harvard, ¿no?
Es muy significativo que el encuentro haya tenido lugar este año en Harvard, una de las universidades más prestigiosas del mundo. El decano de la Facultad de Divinidades de esa universidad tomó parte del encuentro. El próximo año se realizará en Princeton, New Jersey, gracias a la invitación de otro de los participantes. Soñamos con que un día el encuentro pueda realizarse en la UAP.
¿Cuáles son las repercusiones que pueden tener los resultados de este encuentro?
Es muy difícil pensar en normas internacionales de libertad religiosa, especialmente teniendo en cuenta que hay países muy importantes (como Estados Unidos, por ejemplo) que no adhieren a muchos de los tratados internacionales sobre derechos humanos, y que no reconocen la jurisdicción de los tribunales supranacionales. Con todo, hay normas en vigencia y organismos que realizan un trabajo muy interesante. En Argentina, he tenido el privilegio de contribuir al trabajo realizado por algunos expertos del Consejo Argentino para la Libertad Religiosa (CALIR) para la redacción de un borrador de convención internacional sobre el tema. Será presentado próximamente y hay expectativas de que pueda ser impulsado por nuestro país en el seno de la Organización de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos.
¿Qué experiencias pudo recoger en estos días de diálogo y debate?
Las experiencias son muchas, variadas y valiosas. Por un lado, están las formales, que tienen que ver directamente con el contenido mismo de las discusiones. Por otro lado, están las experiencias más informales, pero igualmente significativas, como aprender a conducir discusiones en grupos heterogéneos y de alto nivel, o la sutil diplomacia necesaria para buscar consensos en medio de las diferencias de criterio.
Los debates dan lugar a un documento consensuado, en el que se expresan los acuerdos básicos en forma de una declaración y de recomendaciones concretas. Esto se pone a disposición de los gobiernos y las instituciones para que sirvan de referencia a la hora de tomar decisiones.
¿Qué posición presentó el CEDyR ante el tema que cruzó esta reunión de expertos?
Siendo esta mi primera participación lo tomé como una instancia de aprendizaje e inserción en el grupo. El ser el más joven también influyó para que opine poco y escuche mucho. Por supuesto tengo mis posiciones, muchas de las cuales son discutidas y consensuadas con los colegas de CEDyR, y voy intentando compartirlas con prudencia.
¿Cuál o cuáles son los nuevos paradigmas que marcan o marcarán el rumbo sobre las discusiones acerca de una normativa internacional sobre libertad religiosa?
La realidad dura nos señala que la libertad religiosa parece hoy un derecho en retroceso. Es responsabilidad de todos defender las libertades ya conseguidas y asegurar las pendientes. Por difícil que sea, es una empresa noble que debe ser encarada con fe y valentía.
Esta es la décima octava vez que se reúne el grupo y, a lo largo de los años, muchos de los trabajos presentados han sido publicados en Fides et Libertas, la revista académica de la IRLA.
